TENEMOS UN PADRE QUE RESPONDE NUESTRAS ORACIONES

 

TENEMOS UN PADRE QUE RESPONDE NUESTRAS ORACIONES

Día 2

Club de Intercesores

Tenemos un Padre celestial que responde nuestras oraciones

Mateo 7:9-11

»Ustedes, los que son padres, si sus hijos les piden un pedazo de pan, ¿acaso les dan una piedra en su lugar?
O si les piden un pescado, ¿les dan una serpiente? ¡Claro que no!
Así que si ustedes, gente pecadora, saben dar buenos regalos a sus hijos, cuánto más su Padre celestial dará buenos regalos a quienes le pidan.

Toda persona que ha recibido a Cristo Jesús es convertida en un hijo de Dios, somos adoptados por Dios Padre, e incorporados a su familia celestial. No estamos huérfanos. Somos hechos ciudadanos celestiales con plenos derechos de nuestra ciudadanía.

Tenemos una línea directa al cielo. La actitud del Padre no es de negligencia o indiferencia a nuestras necesidades.

Hay una diferencia con nuestros padres terrenales y Dios padre. Nosotros somos malos. Por lo tanto, podemos fallarle a nuestros hijos y no responder a sus necesidades. Pero nuestro padre celestial es bueno y nos da cosas buenas a sus hijos.

Tal vez tuviste un padre que no supo o no quiso suplir tus necesidades, no le interesó.  Por ello miras y percibes a nuestro Dios y Padre celestial igual.  No es tu razón, sino tu corazón el que te hace percibir incorrectamente a Dios.

Tal vez tuvistes un buen padre, y Jesús nos enseña que aun tu padre es un pecador.  Esto quiere decir que tiene una tendencia a hacer lo malo, pero el amor que siente por ti, lo lleva a procurar darte lo que necesitas.

Hoy es el día que perdones a tu padre terrenal por no haber suplido tus necesidades y por haberte abandonado.  Dile en oración: Papá te perdono por: ..... (y di en voz alta por qué lo perdonas).  Ahora, agradécele a Dios Padre que aun en los momentos más terribles y difíciles, él ha estado a tu lado, aunque no lo veías, Dios estaba contigo.  

Ahora, compromete a ser un buen padre con tus hijos.  "porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incredulo" (1 Timoteo 5:8 RV60). Y a partir de hoy imitaras a Dios como un Padre que ama, que provee para las necesidades de los suyos.

Por lo tanto, debes desechar el pensamiento que Dios quiere destruirte, dañarte, causarte mal. Saca de tus pensamientos que Dios es perverso y disfruta de tus sufrimientos. Y comienza a creer que Dios te ama y suple tus necesidades, lo que necesitas.

Pero los buenos regalos de Dios se activan pidiendo. Es necesario que te dediques a la oración, para recibir esos regalos destinados para ti.

Coméntame por aquí: ¿Cómo te ayuda ésta promesa?¿Qué quieres conocer acerca de la oración? ¿Ayudó a tu corazón? ¿Pudiste perdonar a tu Padre Terrenal?